lunes, 21 de septiembre de 2009

La unidad amarga

Ante las cada vez más frecuentes noticias de disensiones en el seno del PSOE, este fin de semana sus dirigentes realizaron una complicada puesta en escena con parafernalia de Comité Federal gracias a la cual mostrar al mundo su monolítica unidad, su ausencia de disensiones, de discrepancias o de matices, esto es, de pensamiento libre. Se reunieron cuantos notables en el partido son para gritarle al líder "tranquilo José Luis, todos somos contingentes pero tu eres necesario" y cosas por el estilo, y si bien no consiguieron convencer a la ciudadanía de que nadie en ese partido tiene opinión propia (algo de todo punto absurdo siendo un número tan grande de personas), si que mostraron claramente a quien quisiera verlo que sus ideas, por matizadas y discrepantes que sean, quedan en un segundo plano si las comparamos con el verdadero objetivo del partido, que es el poder, y en eso sí que han mostrado verdadera unidad, en la coincidencia en que la integridad intelectual, la dignidad personal y los principios no son sino los adornos que debe exhibir orgulloso quien aspira al poder para olvidarlos cuando lo consigue. Si el objetivo era mostrar unidad (en torno al líder, se entiende), cabe concluir entonces que tristemente lo han logrado, si el objetivo era mostrar a la ciudadanía un partido en el que merece la pena confiar, en ese caso el fracaso no podría haber sido mayor. Espantoso ridículo el de un partido que se dice plural y progresista y que cada vez recuerda más a la peor tradición monolitica y de pensamiento único del más rancio PP de Aznar.

1 comentario:

alfredo dijo...

Hola Andrés, un texto muy bueno. Por desgracia todos los partidos españoles pecan de lo mismo. Buscan el poder, el éxito, y lo demás da igual. Lo vemos en el PSOe, el PP, UPyD, Ciudadanos...No se si alguna vez surgirá algo digno de apoyo.